La victoria de Niki Terpstra en la Paris-Roubaix ha constituido una gran alegría para el ciclismo holandés y sus aficionados. Holanda es un país de envidiable cultura ciclista al que no le acompañan con frecuencia los éxitos deportivos de sus ciclistas, y en el caso de la gran clásica Paris-Roubaix, el año 2001 era la fecha que figuraba como el último triunfo de un holandés, Servais Knaven.
El triunfo de Terpstra (29 años) en la Paris- Roubaix se fraguó en los últimos kilómetros y en el siguiente vídeo se puede ver la calidad de los ciclistas que figuraban en el grupo de cabeza (Sagan, Stybar, Degenkolb, Cancellara, Wiggins y Boonen entre otros) y cómo el equipo que tenía más ciclistas en ese grupo jugó acertadamente sus cartas. Terpstra reconoció que fue su director la persona que le ordenó el momento del ataque final.
Retomando el tema de la falta de triunfos holandeses, si hablamos de grandes vueltas nos tenemos que remontar a la victoria de Joop Zoetemelk en el Tour de Francia de 1980, para encontrar inscrito a un ciclista de Holanda en el palmarés del Tour, Vuelta o Giro. ¿Por qué un país con tanta afición y cultura ciclista no consigue situar a sus ciclistas más alto?
La grandes esperanzas holandesas estos años giran en torno a tres nombres: Robert Gesink, Bauke Mollema y Wilco Kelderman. Ahora habrá que incorporar al sorprendente contrarrelojista Tom Dumoulin.
La mala suerte ha vuelto a fijarse en el espigado Robert Gesink. Con 27 años y casi 1.90 de estatura, Robert llamó la atención muy pronto por sus grandes hazañas en el campo amateur y todavía se le recuerda en España por su exhibición en una edición del prestigioso Circuito Montañés. A Robert le diagnosticaron una arritmia cardíaca. Al parecer la venía sufriendo hace tiempo y ahora es cuando ha decidido junto con los médicos encontrar una solución a un problema que otros ciclistas ya han experimentado (Bobby Julich). Gesink es un ciclista al que asuntos familiares graves, como la muerte de su padre practicando mountain bike, lesiones graves, un coche le atropelló y se fracturó el fémur y caídas en competición han lastrado su progresión. Tras la operación a que ha sido sometido, ahora toca recuperarse y podría regresar en la Vuelta a España. Podéis ver un interesante vídeo sobre Robert Gesink (de su época en Rabobank) que ayuda a comprender la clase de corredor que es el ciclista holandés.
Bauke Mollema, también con 27 años, posee una trayectoria similar a Gesink en cuanto a éxitos. Destacó en el campo amateur (Tour del Porvenir y Circuito Montañés) y su innegable espíritu de lucha y calidad le ha llevado a estar entre los primeros en la última edición del Tour y hace tres años destacar en la Vuelta Ciclista a España (maillot de la regularidad). Falta un pasito más para acercarse al podium pero afortunadamente a Bauke le han respetado las lesiones.
Por último, Wilco Kelderman. El más joven de los tres (23 años), tiene una gran planta sobre la bicicleta y es considerado como el más completo de los tres, gracias a su rendimiento en contrarreloj. Todos los ojos empiezan a fijarse en él, sin embargo esto podría perjudicar su desarrollo porque a nadie escapa que las grandes expectativas depositadas en Holanda sobre sus corredores provocan una presión constante que no todos pueden sobrellevar.
Los tres ciclistas provienen de la cantera del desaparecido «Rabobank» y ahora militan juntos en la escuadra que heredó todo su potencial, el Team Belkin. Existen opiniones que aconsejan un cambio de equipo a estos corredores con el objeto de mejorar en su rendimiento, aspecto que nos recuerda a nuestro «Euskaltel» donde excepto Samu Sánchez, el resto de grandes corredores del equipo vasco no acabaron de subir a lo más alto en las grandes competiciones; Continuamente eran señalados por afición y medios de comunicación como los grandes favoritos y esa presión ha sido reconocida posteriormente por ciclistas como el guipuzcoano Haimar Zubeldia.
Esta temporada puede ser importante para la progresión de los tres ciclistas holandeses, aunque en el caso de Gesink lo primero es recuperarse cuanto antes de su dolencia cardíaca y el deseo que pueda volver a recuperar su mejor nivel. Y si es pronto, por ejemplo en la Vuelta Ciclista a España, mejor.